
Estos días en Barcelona, la gente puede votar cómo le gustaría que fuera la Diagonal (una avenida que cruza la ciudad de punta a punta). Estaría muy bien que fuera un espacio donde realmente se pudiera transitar de una manera diferente a lo que pasa en la mayoría de las principales ciudades (al menos de aquí, al sur de Europa). Pues eso, poder ir tranquilamente en bici, a pie o transporte público y no engullido por el tráfico, como pasa ahora.
Quizá esto sea una utopía, porque es obvio que ir en coche también es necesario en muchos casos, pero estaría muy bien.
Y que no sea por perdir, que impere el sentido común, que no halla necesidad de rizar el rizo en las regulaciones. Que los ciclistas respeten a los peatones y viceversa, sin que haya multas de por medio.
Yo voto por una convivencia más natural, no tan forzada.